Autor: Yanitzia Canetti
Ilustrador: Ángeles
Peinador
Editorial: Everest
En “Ay, luna, luna, lunita…” los
animales de la granja de Federico Feliciano de la Feria, son los protagonistas.
Estos no se sienten a gusto siendo el animal que son y piden a la luna amanecer
siendo otro animal completamente diferente, pero también de la granja. A causa
de esto, los animales cada día que amanece son cada día uno distinto, excepto
uno, el cual pide ser mejor cada día pero sin dejar de ser lo que es.
Como se puede apreciar es un libro
de tamaño grande, con lo que se consigue llamar la atención del niño. Además,
es de tapa dura, permite utilizarlo en aula sin problema a ser estropeado con
facilidad. Por otro lado, en la portada podemos ver el título del libro “Ay,
luna, luna, lunita…”, con lo que podemos hacer actividades de pre-lectura con
los niños preguntando sobre que piensan ellos que tratará. Aparece una imagen
en la portada, en la que se puede observar la luna y una granja con animales,
con lo que también podemos realizar esas actividades pre-lectura, e incluso explicar
cómo es una granja y qué hace en los animales en ella. Asimismo aparece el
nombre del autor, del ilustrador y la editorial, de esta forma se puede ir
enseñando a los niños y niñas a que diferencien cada cosa y sepan buscar libros
por el nombre del autor. En la contraportada, aparece un resumen del libro, de
forma que los padres y madres pueden saber de qué trata el libro y tener
información sobre qué van a leer sus hijos e hijas.
Cuando hablamos del
interior del libro, en primer lugar se puede apreciar que es un libro corto
porque no tiene un número alto de páginas, de forma que el niño o niña puede
leer solo sin llegar a aburrirse por ser largo. Si observamos el texto antes de
leerlo se puede ver que no hay mucho texto en cada página, esto hace que los
niños puedan leerlo por sí mismos en esos primeros años que empiezan a leer sin
cansarse. Si hablamos de la ilustración, también antes de leer, se puede
observar que son dibujos con muchos detalles sobre los animales, y todo aquello
que se puede ver en las granjas.
Cuando empezamos a leer y
hablamos de la estructura de la historia, se puede decir que es un estructura
repetitiva, es decir, todos los días se repite esa misma historia, los animales
tienen un problema y es resuelto en ese mismo día, pero al día siguiente
vuelven a tener ese mismo problema, y así sucesivamente. Además el texto tiene
características repetitivas que se puede observar cuando todos los animales
piden su deseo a la luna y dicen: “ay, luna, luna, lunita, tú que eres tan
bonita. ¿Me podrías complacer antes del amanecer?”. También, tiene características
de texto poético, lo que facilita la compresión del niño y el mantenimiento de
su atención, como por ejemplo “Quiero tener alas, me gustaría nadar. No quiero
bañarme en lodo, y no me gusta engordar”. Asimismo, aparece el sonido de los
animales escrito, en negrita, en el texto de forma que se les puede enseñar a
los niños, e incluso ellos pueden representar ese sonido, siendo partícipes en
la historia contada. El vocabulario usado, es simple, facilitando de esta
forma, la comprensión del niño/a en cada momento. Cuando hablamos de la
ilustración, una vez leído el texto, se puede observar como en cada página
aparece representado aquel animal del que habla en ese momento. Pero no solo
aparece el animal, sino que también hay más detalles como la comida del perro,
la charca del pato, la hierba, etc. Además, se le da vida a la luna, que es la
protagonista de la historia, poniéndola una cara con boca, nariz y ojos, así
como una linterna representando la luz que da.
Para finalizar, se puede decir
que con este libro se puede trabajar los animales de una granja, donde viven, qué
comen, que hacen, etc. así como qué no hay que desear ser otra persona, sino
ser mejor cada día, porque nadie es mejor que nadie.
Jesica Blázquez Sánchez